martes, 20 de agosto de 2013

HORMIGAS





Llegaban en fila todas juntas
desde cualquier parte
y se asomaban al borde
de la montaña: una,
que las demás la seguían.

Volvieron al lugar de origen.

Después trazaron
un círculo enlazadas
como siempre pero esta vez
era para dialogar,
mas nunca se supo
qué fue lo que acordaron.

Cabizbajas se acercaron
a un río
y se adentraron
en él.
Algunas se sumergieron
hacia el fondo y otras
salieron volando
por los aires.



M. Godúver

1 comentario:

viky frias dijo...

Gregarias, como los humanos,
fáciles de pisar,
seguidoras de cualquiera
que se ponga en cabeza;
transportan más carga de la que pueden soportar,
y ahí siguen, girando en torno
a su pequeña montaña de tierra.