jueves, 31 de diciembre de 2009

NAVIDAD


Los troncos de los árboles
brillan como luciérnagas,
las calles parecen de cuento
por las techumbres tiernas
de diversos colores
y lucen en un tintineo.
En el exterior se echa de menos
una luz que guíe a la paz
que se pretende en navidad.
El interior se sosiega
en espera de una vida nueva.


M. Godúver

1 comentario:

viky frias dijo...

La vida nueva llegará
cuando se acaben las fiestas de Navidad,
cuando se apaguen las luces de la ciudad
y empiecen a alumbrar
las lamparillas del pensamiento
no tan costosas, pero más brillantes
que las que cuelgan por las calles los alcaldes
derrochando luminosamente nuestros impuestos.