
Barrios señoriales,
glorietas entrañables,
carruaje estupendo
solo para un momento.
Llegaste y nos fuimos,
caminé a un infinito.
¿Dónde fuimos?
¿Cómo llegaste?
¿Dónde he ido?
La historia de otro tiempo
me transporta lejos,
las épocas se agolpan,
me detengo en una fase
atemporal
y camino por este
barrio señorial.
M. Godúver
1 comentario:
Los barrios señoriales
son gratos para vivir.
Si yo fuera ladrón, me mudaría
a uno de esos barrios de postín,
para tener más próxima la mercancía.
Publicar un comentario